Pero nada hay más efectivo que nuestro propio cuerpo y la sensación literal de sudar la camiseta. La camiseta está bien. Tienen infinitas combinaciones y eso los convierte en las piezas más demandadas por nuestras clientas desde el principio. Sí, es cierto que hay apps maravillosas que nos «obligan» a ir al gimnasio o nos muestra las calorías que llevamos consumidas.